El legado de la pólvora panameña en sus manos
Las manos de Arcelio "Chelín" Espino Ureña aprendieron a crear estructuras y llenar la noches de luces y fuego gracias a su padre “Chelo, El Fueguero” quien fundó la primera fábrica de fuegos artificiales artesanales de Guararé en septiembre de 1945.
“Mi papá hizo los primeros fuegos desde septiembre 1945 hasta 2005, 60 años seguidos”, expresó Espino Ureña.
Desde la década del 70 confecciona juegos pirotécnicos para quemar en las fiestas patronales en honor a la Virgen de Las Mercedes.
En su repertorio de fuegos artificiales artesanales hace artefactos como: el átomo, el sol, la corea, correcaminos, seis cachos, montantes, ruedas, platillos y una gran variedad de voladores que en ocasiones combina en los ramilletes de voladores.
Todo esto con más de 20 productos químicos y herramientas sencillas como balanza, guillotina, cuchillos, martillos y otras herramientas simples con las que fabrica los bellos juegos pirotécnicos artesanales que luce año tras año en estas festividades.
“Desde que murió mi papá en el 2009 los fuegos pirotécnicos de la Virgen de Las Mercedes, solo para Guararé y lo haré hasta que me muera”, enfatizó.
Yalena Ortíz
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