Gilgeous-Alexander culmina una temporada redonda con su primer anillo de NBA



En unas Finales de infarto, el canadiense Shai Gilgeous-Alexander guió a Oklahoma City Thunder a su primer título de la NBA, un broche de oro a una de las mejores temporadas individuales de los últimos años.
La nueva superestrella de la liga de básquet norteamericana anotó este domingo 29 puntos para rematar a los Indiana Pacers en el séptimo y definitivo partido de las Finales.
Como estaba previsto, 'SGA' fue reconocido como el Jugador Más Valioso (MVP) de las Finales con un promedio de 30,3 puntos, 4,6 rebotes y 5,6 asistencias.
Este galardón, el primero para un integrante de su franquicia y para un jugador canadiense, le abre las puertas de uno de los clubes más selectos de la NBA.
Gilgeous-Alexander es el cuarto jugador de la historia en acaparar el premio MVP de las Finales, el de la fase regular y el título de máximo anotador (32,7 puntos de promedio) en la misma temporada. Sus acompañantes son tres mitos: Kareem Abdul-Jabbar, Michael Jordan y Shaquille O'Neal.
- Traspaso catastrófico -
Con un manejo de balón privilegiado para su 1,98m de altura, 'SGA' ha escalado hasta la cima imponiendo un estilo de juego a contracorriente.
Alejado de la obsesión actual por los triples, el canadiense martiriza a sus defensores con sus habilidosas entradas a canasta o con su implacable tiro de media distancia.
Su aterrizaje en la liga fue discreto, al ser elegido en el undécimo lugar del Draft de 2018 por Los Angeles Clippers.
Aunque su temporada de novato fue prometedora, los Clippers lo incluyeron un año después en el megatraspaso por el que reclutaron a Paul George desde Oklahoma City. El equipo angelino entregó también cinco elecciones de primera ronda en su obsesión por emparejar a George con Kawhi Leonard.
Con la perspectiva del tiempo, la operación acabó siendo un fracaso para los Clippers, que no llegaron a competir por el título y a la vez dejaron escapar a un futuro MVP.
Para Oklahoma City, el botín recibido fue la clave de la reconstrucción de su plantel, que reclutó en el Draft a los otros jóvenes pilares como Jalen Williams y Chet Holmgren.
Pero la piedra angular siempre fue Gilgeous-Alexander que, sin la atención mediática de otras jóvenes estrellas, no ha bajado de los 30 puntos de media en las últimas tres temporadas.
- "Me digo que soy el mejor" -
"Cada noche me digo a mí mismo que soy el mejor jugador de la cancha y quiero que todo el mundo lo sienta así", afirmó el canadiense en el documental de la NBA "Pass the rock" (Pasa el balón).
"Busco el equilibrio entre respetar al adversario y no tener miedo a nadie. Así es como te conviertes en un LeBron (James), un Kobe (Bryant) o un Michael Jordan", señaló.
Nacido el 12 de julio de 1998 en Hamilton, a las afueras de Toronto, el base heredó sus cualidades físicas de su madre, Charmaine Gilgeous, que compitió en los 400 metros planos de los Juegos Olímpicos de Barcelona-1992 por la isla caribeña de Antigua y Barbuda y después ejerció de trabajadora social con ingresos modestos.
En su adolescencia, Gilgeous-Alexander compartió sus sueños de llegar a la NBA con su primo Nickeil Alexander-Walker, que juega en los Minnesota Timberwolves y se enfrentó con 'SGA' en la final de la Conferencia Oeste.
El canadiense se trasladó a Estados Unidos para terminar sus estudios de secundaria y jugó una temporada en la prestigiosa Universidad de Kentucky antes de dar el salto a la NBA.
Fuera de las canchas, Gilgeous-Alexander se distingue también de muchos compañeros con una imagen moderna y cuidada.
"SGA es muy humilde, es el hijo que todos querríamos tener", dijo a la AFP Chris, un abonado del equipo de 40 años, al visitar este mes el mural que homenajea al nuevo campeón.