APEDE expresa preocupación por aplazamiento de la Cuarta Línea de Transmisión Eléctrica

La Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (APEDE) manifestó su preocupación por la decisión de aplazar nuevamente la construcción de la Cuarta Línea de Transmisión Eléctrica, un proyecto que durante más de una década ha sido considerado estratégico para la confiabilidad del sistema eléctrico nacional y para el desarrollo económico de Panamá.
En un comunicado fechado el 29 de septiembre de 2025, APEDE señaló que “la suspensión indefinida de esta obra no solo representa un retroceso en la planificación energética, sino que también envía un mensaje de incertidumbre a los inversionistas, al sector productivo y, sobre todo, a los hogares panameños que esperan un servicio eléctrico confiable y competitivo”.
La asociación recordó que este proyecto está concebido para “garantizar la redundancia y confiabilidad del Sistema Interconectado Nacional, facilitar la incorporación de nuevas fuentes de energía renovable, fortalecer la interconexión de Panamá con Centroamérica a través del Mercado Eléctrico Regional y reducir las pérdidas técnicas del sistema, evitando sobrecostos que terminan afectando al consumidor”.
Asimismo, APEDE destacó que la construcción de la línea permitiría “aprovechar de manera más eficiente el potencial energético de Chiriquí y Bocas del Toro, acercando la energía limpia a los centros de mayor consumo”.
Sobre las acciones temporales, la asociación reconoció que “la repotenciación ayuda a corto plazo, pero no resuelve el problema de fondo: un sistema que ya opera al límite, vulnerable a fallas y sin la resiliencia que Panamá necesita”.
En su comunicado, APEDE enfatizó que “la energía es motor de competitividad, productividad y calidad de vida. Cada día que se pospone esta obra, Panamá pierde oportunidades de atraer inversión, consolidar su transición energética y garantizar tarifas más estables para la población”.
Por ello, la asociación hizo un llamado a las autoridades a:
“Reconsiderar la suspensión del proyecto y reconocer su carácter estratégico”.
“Agilizar la revaluación técnica exigida por la ASEP, con transparencia y rigor”.
“Escuchar a la sociedad civil, al sector empresarial y a las comunidades, para que este proyecto se concrete bajo altos estándares ambientales y sociales”.
APEDE concluyó que “el futuro energético de Panamá no puede seguir aplazándose. La Cuarta Línea de Transmisión es una decisión de Estado que marcará la diferencia entre quedarnos rezagados o avanzar hacia un sistema eléctrico más seguro, limpio y competitivo”, y reiteró su compromiso de “acompañar y aportar propuestas constructivas que aseguren un desarrollo energético sostenible, en beneficio de todos los panameños”.