EDITORIAL: Con calma y buena letra
04 de agosto de 2020
Haciendo honor al refranero popular, la apertura de la economía está condicionada a la reducción de los casos de contagio, el número de fallecidos y de la carga que hay, actualmente, sobre el sistema de salud público y también privado.
Agosto será un mes decisivo para bajar la curva, contener la enfermedad y mejorar las medidas de control que se están aplicando en barrios, oficinas públicas y en el sector productivo privado.
Todas las medidas que se adopten, en el futuro, se deben basar en los resultados científicos y médicos, para tener los resultados esperados.