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Macedonia y Grecia buscan el camino de la reconciliación

02 de agosto de 2019

Viena (AFP) - La carretera macedonia que conduce a Grecia acaba de ser rebautizada 'autopista de la amistad', prueba de que Skopie y Atenas desean resolver su diferendo sobre la palabra 'Macedonia', objeto de una importante reunión en Viena.

Las conversaciones se iniciaron este viernes en la capital austriaca entre los ministros de Relaciones Exteriores griego y macedonio, Nikos Kotzias y Nikola Dimitrov, en presencia del emisario de la ONU, Matthew Nimetz.

Desde que la exrepública yugoslava declaró su independencia en 1991, los griegos le niegan el derecho a utilizar el nombre de 'Macedonia' que, según ellos, solamente puede referirse a su provincia septentrional.

Este litigio frena, además, las ambiciones de adhesión de Macedonia a la Unión Europea y la OTAN.

En la ONU, el país sigue siendo designado bajo el acrónimo de ARYM (Antigua República Yugoslava de Macedonia, o FYROM por sus siglas en inglés).

Los griegos también les niegan el derecho a reivindicar la herencia de los antiguos reyes Alejandro Magno y Filipo de Macedonia.

Entre los nombres más habitualmente citados por los medios de ambos países figura en particular 'Gorna Makedonija', 'Alta Macedonia'.

- Determinación común -

Ahora hay una 'determinación común de los primeros ministros Alexis Tsipras y Zoran Zaev para resolver el problema' explica el politólogo macedonio Nano Ruzin, exembajador de su país en la OTAN.

Pero las rigideces nacionalistas siguen presentes en ambas partes. Se reflejaron en Grecia con recientes manifestaciones gigantes en Atenas y Tesalónica, capital de la provincia griega de Macedonia, con las amenazas dirigidas al ministro Nikos Kotzias o por el sondeo que apareció el domingo según el cual siete de cada 10 griegos serían hostiles a un nombre que incluya el término Macedonia o un derivado.

En Skopie, el tema puede convertirse en un posible instrumento para que la oposición de derecha nacionalista (VMRO-DPMNE) fragilice al gobierno, que cuenta con una mayoría reducida. El VMRO-DMPNE 'apoya el proceso' negociador, dice uno de sus responsables, Aleksandar Nikoloski, que se queja en cambio de que 'el partido en el poder no nos consulte más'.

Pero todavía hay serios obstáculos. Atenas exige que el cambio de nombre de su vecino sea validado por un cambio constitucional, y que se aplique a todos en todas partes, según el principio jurídico del 'Erga Omnes'.

- Peligroso referéndum -

Sin embargo, incluso con el apoyo de los partidos de la minoría albanesa, los socialdemócratas que lideran el gobierno de Zoran Zaev no tienen una mayoría en el parlamento que les permita que se acepte un cambio constitucional. Y un referéndum se antoja muy peligroso, según los analistas.

Los macedonios esperan que un progreso en estas negociaciones les acerque a una adhesión a la UE -los fondos europeos serían cruciales para su exangüe economía- y también a la OTAN.

'En un compromiso honorable, no se puede obtener todo lo que uno quiere', afirmó Nikos Kotzias tras su último encuentro con su homólogo macedonio Nikola Dimitrov, la semana pasada en Skopie. El ministro griego aceptó aterrizar en la capital macedonia después de que las autoridades locales aceptaron que dejara de llamarse Alejandro Magno.

En las calles de Skopie, Ana Bogoeva, informática de 25 años, destaca que tiene la misma edad que este diferendo: 'Cambiemos de nombre y pasemos a otra cosa. Pero yo soy macedonia y eso es algo que no puede cambiarse', dice, con un cierto tono de desafío en la voz.

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