La donación de córneas: un acto de generosidad con barreras emocionales
La donación de órganos es un acto de generosidad que ha salvado miles de vidas, pero, dentro de este proceso, uno de los tejidos más importantes y, a la vez, menos frecuentes de ser donados son las córneas. Así lo dio a conocer la Caja de Seguro Social (CSS).
La Dra. Ihamir Duarte, coordinadora nacional del Programa de Trasplante de la CSS, explicó que cuando se realiza una entrevista para la donación de órganos, los familiares son informados de que, además de los órganos vitales como el corazón, los riñones y el hígado, también es posible donar tejidos como las córneas.
Sin embargo, en muchas ocasiones, los familiares se muestran reticentes a donar las córneas, y solicitan que se extraigan todos los órganos, pero que se respete la integridad de los ojos.
“En muchas situaciones, los familiares nos indican que, aunque pueden extraerse otros órganos, prefieren que las córneas no sean tocadas. La percepción de que se puede alterar la apariencia del fallecido es uno de los principales factores que generan este rechazo”, comentó la Dra. Duarte.
La coordinadora del programa señaló que es fundamental que los familiares comprendan el procedimiento técnico y médico involucrado en la donación de córneas para reducir cualquier temor relacionado con la alteración estética del cuerpo del ser querido. Según explicó, cuando se realiza la extracción de los órganos, las córneas son extraídas al final del proceso, en una intervención muy cuidadosa.
“La extracción de las córneas no implica retirar el ojo completo. Solo se extrae la capa más externa, que tiene la forma de un lente de contacto y cubre el iris. Este procedimiento se realiza con la máxima delicadeza para garantizar que no haya ninguna alteración en la anatomía del cuerpo”, detalló Duarte.
Después de la extracción, el cuerpo del donante es cubierto con un material especial para asegurar que no se note ningún cambio visible en la zona ocular. Las córneas, posteriormente, son evaluadas por oftalmólogos especializados para determinar si son aptas para ser trasplantadas a otro paciente que las necesite.
Duarte también destacó que, durante las entrevistas con los familiares, se explica claramente este procedimiento para disminuir la ansiedad que pueda generar el miedo a la mutilación.