Cerebros electrónicos
Pasó desapercibida la enorme noticia de que Panamá se prepara para entrar en el mundo de la fabricación, ensamblaje y exportación de semi conductores electrónicos. La posibilidad de ser un país productor y distribuidor de chips a nivel global, con un enorme valor comercial y de paso miles de plazas de empleo de alta remuneración.
El 30 de abril, el presidente de la República Laurentino Cortizo Cohen firmó el decreto ejecutivo que establece el marco legal para el desarrollo, impulso y creación de las condiciones necesarias para la actividad microelectrónica y de semiconductores en Panamá. El costo de instalar una ensambladora de semiconductores se estima en unos 600 millones de dólares.
En el mundo hay una lucha feroz por hacerse de forma segura y continua de este artilugio; los semiconductores o microchips, elementales en todas las industrias, desde los smartphones, ordenadores, electrodomésticos, autos, aviones etc., vivimos rodeados aparatos con microchips que se han vuelto imprescindibles para la vida , como para el desarrollo de la actividad empresarial e industrial.
Sucede que los mayores fabricantes de estos pequeños cerebros electrónicos los lideran Taiwán, seguidos de Corea del sur y China quienes acaparan el 87 % del mercado mundial de microchips, según datos de ‘trendforce’, o sea; Asia posee el negocio de las fundiciones, las fábricas de los chips, también las denominadas ‘fabless’ (“sin fábrica”) que solo diseñan y venden el hardware, para luego subcontratar la producción, que ha sugerido una dependencia peligrosa.
Por ello, la Unión Europea (UE), a través de Bruselas hizo un anuncio reciente de un plan de 43.000 millones de euros para cortar la dependencia de Europa en cuanto a microchips; el plan es “garantizar la seguridad del suministro, la resiliencia y el liderazgo tecnológico de la UE en tecnologías y aplicaciones de semiconductores”.
Para este lado del mundo la crisis de los semiconductores nos llega, de forma muy resumida, en una escasez de chips, lo que ha provocado preocupación en numerosos sectores de la economía y la electrónica de consumo, hasta el punto de que grandes empresas se han visto obligadas a parar su producción.
En consecuencia; el año pasado la secretaria de Comercio de Estados Unidos (EEUU), Gina Raimondo, nos visita y dijo que EEUU eligió Panamá como uno de los siete países a nivel mundial con los que establecerá una colaboración para reforzar la cadena de valor global de semiconductores, que hoy se cristaliza con la firma del decreto por el presidente, que, además, anunció la creación de un centro de tecnología avanzada de semiconductores (c-tasc) con el asesoramiento de la Arizona State University.
Panamá está en el umbral de los países que pueden dar un salto gigantesco para el desarrollo económico y tecnológico y de paso, lograr el pleno empleo, a través de esta tecnología de fabricación o ensamblaje de micro cerebros electrónicos.
* Comunicador social.