Seguro mató a confianza
Estamos por culminar el primer mes del año 2022, y aunque algunas situaciones han mejorado, no es menos cierto que otras están decayendo.
El Omicrón (variante de Covid-19) se veía venir, pero en esta guerra a varios soldados, aunque advertidos, los agarraron con los pantalones abajo. La confianza y el desconocimientos de algunos está causando un incremento notable de caos que aunque no se comparan con los años anteriores sí debe preocuparnos.
La economía intenta recuperarse pero con miles de personas en aislamiento, aunque sin presentar síntomas graves, ese panorama no se ve alentador. Como vacas debemos arriar a nuestros familiares a una vacunación que puede salvarle la vida, y aunque dice que la edad trae sabiduría, entre más edad más difícil es hacerle entender, los beneficios de cada dosis.
Las preguntas sigue apareciendo es cierto, pero queremos tener el tiempo para responderla.
De Nada te vale tener la razón si estás tú o tus seres queridos cuatro metros bajo tierra.
Ya para que llorar. Hoy en día debemos estar seguro de lo que hacemos y como lo hacemos. Cada paso que damos, cada decisión que tomamos, puede ser la diferencia entre mantener la salud o perderla. Y no estamos hablando de contagiarnos y pasar varios días con dolores o malestares; de las consecuencias a largo plazo. Aún es desconocida las repercusiones que pueda tener en las personas caer con síntomas leves, moderados o graves de esta enfermedad.
Es impredecible el futuro, y algunos con orgullo dicen ya me dio y no me dio tan fuerte como dice, pero no conocemos en unos años, que otras enfermedades estarán asociadas a este mal por ello es mejor evitar caer.
No por nada, seguro mató a confianza.
Yalena Ortíz
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* La autora es periodista.
