El café recolado y el arroz dormido
06 de junio de 2021
La costra del arroz, el ahora afamado “concolón” era centro de disputa en el cuarto donde vivíamos.
Cuando naces en el seno de una familia pobre, la matemática materna hace magia para que todo alcance, aunque falte.
El café recolado y el arroz dormido, siempre fueron un recurso para que todos tuvieramos garantizado un “golpe”.
Nos motivó, a los que crecimos en medio de luchas de poder y enfrasques políticos e ideológicos, la educación. Y la gelatina, cuando había, la “cuajábamos” en el techo de la casa, con la humedad inevitable de la noche.
JAMES APARICIO
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