Matthieu Blazy, un discreto superdotado al frente de Chanel

El diseñador Matthieu Blazy, discreto pero con una sólida experiencia, es uno de los estilistas más esperados en esta Semana de la Moda de París, donde presentará su primera colección para Chanel.
“Es uno de los creadores con más talento de su generación”, afirmaron Alain Wertheimer y Leena Nair, dueño y directora general respectivamente de la prestigiosa marca francesa en el comunicado que anunciaba su nombramiento a mediados de diciembre, seis meses después de la repentina retirada de Virginie Viard.
El francobelga de 41 años, hasta ahora en Bottega Veneta (del grupo Kering), tiene la difícil tarea de retomar el estilo Chanel y pasar página tras Karl Lagerfeld. Viard, mano derecha del “kaiser”, asumió la dirección artística de la firma francesa tras su fallecimiento en 2019.
“Tiene cualidades nada desdeñables para asumir el reto. Su trayectoria en la industria del lujo refleja una mirada afilada y una gran adaptabilidad”, estima Sophie Abriat, autora especializada en el sector.
Nacido el 27 de junio de 1984 en París, de un padre experto en arte precolombino y una madre etnóloga e historiadora del arte, Blazy fue descubierto por Raf Simons cuando todavía era estudiante en La Cambre, una prestigiosa escuela de moda de Bruselas.
Simons lo contrata al finalizar sus estudios, en 2007. Trabaja para la línea masculina y conoce a Pieter Mulier, actual director artístico de Alaïa, quien será su compañero durante más de quince años.
Blazy se une a Maison Martin Margiela en 2011, para dirigir la colección Artisanal, una línea experimental que se presenta durante la Semana de la Alta Costura en París.
En esa época diseña una máscara integral incrustada de joyas, que se hará famosa después cuando Kanye West la lleve en sus conciertos.
- “Nace una estrella” -
“Va más allá de los límites de la prenda al jugar con la transformación de los materiales y las formas. La experimentación textil se convierte en una de sus marcas: su ropa es arquitectónica, compuesta de materiales heterogéneos”, explica Sophie Abriat.
“Tiene un discurso que se centra mucho en el saber hacer, la innovación, la artesanía, los detalles de corte, el juego del trampantojo”, completa Alix Morabito, directora de compras en Galerías Lafayette.
En 2014, la famosa crítica de moda británica Suzy Menkes le dedica un artículo: “En Margiela, nace una estrella”.
Ese mismo año, trabaja en Celine junto a Phoebe Philo, y a partir de 2016 se establece en Nueva York para unirse a Raf Simons en Calvin Klein como director de diseño prêt-à-porter hasta 2019.
En 2020, integra Bottega Veneta como mano derecha del director artístico Daniel Lee, a quien sucede al año siguiente.
Jeans azules en trampantojo, hechos de cuero flexible, botas altas con tacones escultóricos moldeados en una sola pieza, sin costuras visibles... Blazy aporta sentido al movimiento y audacia al cuero trenzado de la marca italiana, respetando al mismo tiempo los cánones clásicos de la casa.
Su propuesta funciona y, aunque como muchas industrias del lujo, el grupo Kering atraviesa un período difícil, Bottega Veneta es una de las pocas marcas que registra un crecimiento positivo.