Símbolos que cuentan historias
Llaman a reforzar la educación cívica correcta y a transmitir el valor de cada emblema nacional
M. Salomón | El respeto hacia los símbolos de la nación: la Bandera, el Escudo y el Himno es un deber ciudadano que va más allá de los actos cívicos de noviembre.
El director de la Comisión Nacional de los Símbolos de la Nación, Vladimir Berrío, insiste en la necesidad de reforzar la educación en torno a su uso correcto y a los errores que aún persisten en la práctica.
Berrío recordó que la Ley 34 de 1949, reformada en 2012, establece normas claras que no siempre son conocidas. Entre ellas, que la bandera no debe retirarse de un desfile por lluvia ni doblarse en forma de bandeja.
Además, el director recalcó que no puede utilizarse como mantel, vestimenta o sombrilla, pues representa la patria misma y no un accesorio decorativo. “Nuestra Bandera no es un adorno. Es la madre patria y merece respeto”, enfatizó.
La Comisión aclaró que no es un ente sancionador ni receptor de denuncias, sino un organismo de orientación y docencia. El objetivo principal es educar y promover el conocimiento de las normas, para que tanto estudiantes como adultos transmitan el respeto a las futuras generaciones.
De cara a los próximos desfiles patrios de 2025, el llamado es claro: conocer y cumplir con lo que dicta la ley es parte del compromiso ciudadano con Panamá.
ml | Antes de los desfiles se verifica que la Bandera y estandartes no destiñan. Al inicio de la lluvia, enrollar un poco la bandera en el asta y presionarla con la mano derecha hasta que deje de llover. Entonces se suelta y se deja que seque.
Si empieza a llover en un desfile, no se debe recoger y tampoco se dobla la bandera.
No se deja al portabandera solo con el asta vacía en pleno recorrido del desfile.
No se entrega la bandera doblada a quien la portará para que la lleve como una bandeja el resto del desfile.
Y también pasa algo similar con la entrega de los estandartes en el desfile.
