Joven periodista asesinada en Irlanda del Norte, honrada en su funeral

Belfast (AFP) - Los primeros ministros de Reino Unido e Irlanda se sumaron el miércoles a familiares y amigos de Lyra McKee, la joven periodista que murió la semana pasada por disparos de un republicano disidente, en un funeral concebido como un acto contra la violencia en Irlanda del Norte.
La llegada del ataúd a la catedral de Santa Ana, en Belfast, fue recibida con una fuerte ovación por los cientos de personas reunidas en la calle para rendir homenaje a la periodista de 29 años y que no pudieron entrar por falta de lugar.
Algunos de ellos vestían, por petición de la compañera de McKee, Sara Canning, camisetas con los personajes de Marvel y de la saga literaria Harry Potter. 'Sé que la habría encantado', dijo Canning.
Dentro de la catedral, adversarios políticos se sentaron unos junto a otros, en particular la líder del partido unionista norirlandés DUP, Arlene Foster, y la del partido nacionalista irlandés Sinn Fein, Mary Lou McDonald.
La primera ministra británica Theresa May, que no participó en la habitual sesión de preguntas en el parlamento de Londres para viajar a Belfast, dio su pésame a los allegados de McKee al principio de una ceremonia a la que también asistió el primer ministro de la vecina República de Irlanda, Leo Varadkar, y otros muchos responsables políticos.
'Espero que el asesinato de Lyra en la noche del Jueves Santo marque un nuevo inicio' para esta provincia británica que estuvo durante décadas sacudida por la violencia, dijo el sacerdote católico Martin Magill.
Llamó a 'todos los que tienen una parte de responsabilidad' en su muerte a 'tomar el camino de la no violencia' y a los responsables políticos norirlandeses a retomar sus discusiones para formar gobierno en una región que no lo tiene desde enero de 2017.
Según la policía de Irlanda del Norte, Lyra McKee fue asesinada por un hombre que disparó contra los policías, junto a los que se encontraba la periodista, en la madrugada del viernes en el barrio católico de Creggan, en Londonderry, ciudad también conocida como Derry y situada en la frontera irlandesa.
El grupo republicano disidente Nuevo IRA reconoció el martes su responsabilidad en su muerte afirmando que McKee 'a lado de las fuerzas enemigas' y pidió 'disculpas' a la familia.
- 'Ganar al odio por el amor' -
La ceremonia estuvo también marcada por los homenajes que rindieron a McKee su hermana Nichola Corner y su amigo Stephen Lusty, quien la describió como una joven 'inteligente, amable, apasionada, fogosa, generosa, divertida y sinceramente compasiva'.
Incluso logró hacer reír a los presentes con varias anécdotas sobre esta joven que preveía pedir en matrimonio a su compañera el próximo mes de mayo.
'Pedimos a todos los que conocieron a Lyra que continúen con su mensaje de optimismo y esperanza, respetando su memoria con dignidad y respeto', había dicho previamente su familia en un comunicado. 'El único medio de ganar al odio y a la intolerancia pasa por el amor, la comprensión y la bondad'.
La muerte de la periodista recuerda el conflicto en Irlanda del Norte que duró 30 años y oponía a republicanos nacionalistas -católicos y partidarios de la reunificación de Irlanda- contra unionistas -protestantes y favorables a mantenerse en la Corona británica.
Los enfrentamientos dejaron cerca de 3.500 hasta el acuerdo de paz de 1998, que llevó a la retirada de las fuerzas británicas del territorio y al desarme del Ejército Republicano Irlandés (IRA).
Sin embargo existen grupos de republicanos disidentes que siguen luchando por la reunificación de Irlanda, incluso por la violencia, como el Nuevo IRA, formado en 2012.
McKee, nacida en Belfast, escribió mucho sobre el conflicto norirlandés, sobre todo sobre los llamados 'bebés de la tregua', la generación que nació tras 1998.
En 2016 la revista Forbes la puso en la lista de 30 personalidades destacadas de menos de 30 años del mundo de los medios de comunicación.
Había escrito un primer libro, 'Angels With Blue Faces', sobre el asesinato en noviembre de 1981 del pastor Robert Bradford, diputado protestante de Irlanda del Norte. Y estaba trabajando en su segunda obra, 'The Lost Boys', sobre una serie de desapariciones.
Según su pareja, Lyra McKee también era una 'defensora incansable' de los derechos LGTB, en una provincia donde el matrimonio homosexual sigue estando prohibido.