La India de los contrastes se prepara y hace un giro hacia Latinoamérica y el Caribe
Panamá es para la India de hoy, un punto estratégico para el comercio, el intercambio de mercancías y el forcejeo que tienen Estados Unidos y China, desde que varios países rompieron vínculos con Taiwán para reconocer a Beijing
NUEVA DELHI. India es una nación vibrante. En pocos meses el Primer Ministro del partido Nacionalista Hindú (Bharatiya Janata), Narendra Modi, someterá su mandato a un tercer periodo y todo parece indicar, según las encuestas, recientes resultados electorales locales y su creciente popularidad permitirán que se mantenga en el poder sin mayores sustos.
India es un país de contrastes. El creciente desarrollo económico en la quinta economía del mundo y el país más poblado del planeta no desvían al gobierno de Modi de los planes que tienen para convertirse en una potencia mundial a la par de sus vecinos de China y Rusia.
Así lo está confirmando una delegación de periodistas de nueve países de Centroamérica, Suramérica y el Caribe invitados para conocer a una nación que busca ampliar sus nexos comerciales y políticos con el continente, más allá de sus tradicionales socios en Asia, Europa, África o Norteamérica.
El ministro de Relaciones Exteriores de India Subrahmanyam Jaishankar ratificó el giro de la política exterior de su país, en un programa de nueve días que realizó el abril del año pasado a Guyana, Colombia, República Dominicana, y Panamá.
India ha reformado su interés en comprar petróleo, derivados y metales. Es el gran exportador de medicamentos genéricos, a bajo costo, hacia Panamá y la región.
Jaishankar, quien en su visita a Panamá se reunió con los cancilleres del Sistema de Integración de Centroamérica (SICA), dijo que su gira confirmó la importancia de los vínculos con Latinoamérica, en estos momentos.
También se entrevistó con los ministros de la de la Comunidad del Caribe (CARICOM).
La India moderna crece con la India antigua. Con sus coloridos bazares populares, un caótico orden y un sistema donde todo funciona al estilo de India.
La industria farmacéutica, el complejo industrial de autos en Indore y el creciente turismo, ponen a esta nación frente a los desafíos de combatir la contaminación ambiental y crear mayor número de científicos e investigadores.
Miembro de los Brics y el G20, India no para y sigue su marcha.
Los grandes y modernos edificios se asoman, en medio de la operación de lujosos hoteles y la consolidación de las más importantes marcas globales, sin dejar de defender el nacionalismo hindú y mostrar con orgullo su historia los monumentos que la cuentan, entre ellos (para mencionar pocos), el Fuerte Rojo, la Puerta de la India, el Palacio presidencial (Rastrapati Bhawan), los mercados y templos sagrados, así como sus fiestas locales y nacionales.
