La policía egipcia evita un atentado suicida en una ciudad turística
El Cairo (AFP) - La policía evitó este miércoles un atentado suicida en Egipto, donde los yihadistas parecen haber cambiado de estrategia ante un Gobierno represivo que intenta atraer a turistas e inversores que soslayan al país desde hace cuatro años.
Este intento tuvo lugar en el templo de Karnak, en Lúxor (sur del país), y fue el segundo contra turistas en el país desde que el ejército derrocó al presidente islamista Mohamed Mursi en 2013.
En Egipto se han producido numerosos atentados reivindicados por grupos yihadistas, desde que el ejército arrestara a Mursi en julio de 2013 y el nuevo presidente Abdel Fatah al Sisi lanzara una dura campaña de represión contra los partidarios del mandatario islamista.
El ataque de este miércoles, si bien aún no ha sido reivindicado, indicaría un cambio de estrategia de los yihadistas.
Para Mathieu Guidere, profesor de geopolítica árabe en la Universidad francesa de Toulouse (suroeste), el intento de atentado de Karnak 'revela un claro cambio de estrategia para elegir los objetivos'.
Los atacantes tienen tres objetivos: 'debilitar la economía egipcia destruyendo el sector turístico, involucrar a las potencias occidentales (...) y darle el mayor impacto mediático posible y resonancia internacional' a lo que está ocurriendo, según Guidere.
'Poco se puede hacer contra los atentados suicidas', estimó. 'Ni los estadounidenses atrincherados en la zona verde de Bagdad lo han logrado. La clave no es militar ni de seguridad, sino política y social', agregó.
Para Zack Gold, del centro American Security Project, un ataque como el de este miércoles 'puede preocupar a la comunidad internacional, en momentos en que los turistas empezaban a regresar, a El Cairo o a Lúxor'.
El miércoles por la mañana, al menos tres hombres entraron en el amplio aparcamiento del templo de Karnak, uno de los lugares más famosos de la época de los faraones.
Detenidos en un control policial, a unos 40 metros de la entrada del templo, los agentes les hicieron abrir el baúl del vehículo y constataron que había dos bolsas sospechosas.
Dos de ellos sacaron entonces un arma y las fuerzas de seguridad abrieron fuego, matando a uno e hiriendo al segundo de gravedad. El tercero murió al hacer detonar su chaleco explosivo, contaron varios oficiales de policía a la AFP.
La policía, que está muy presente en los sitios turísticos de Egipto desde una oleada de atentados en los años 1990, retuvo en el templo a los turistas presentes en el momento de los hechos, 604 en total, para garantizar su seguridad.
- Ola de atentados -
A primeros de junio, dos policías encargados de vigilar las pirámides de Guiza en el Cairo fueron abatidos por asaltantes que iban a bordo de una moto.
Los grupos yihadistas, que reivindican la mayoría de los atentados contra las fuerzas de seguridad, dicen actuar en represalia por la sangrienta represión que el régimen lanzó contra los partidarios de Mursi.
Se estima que más de 1.400 manifestantes murieron a manos de la policía, en las semanas posteriores al derrocamiento de Mursi.
Desde entonces, la policía detuvo a más de 40.000 partidarios del expresidente islamista, según la ONG Human Rights Watch (HRW).
La inmensa mayoría de los atentados perpetrados en Egipto en los últimos meses tuvieron lugar en el norte de la península del Sinaí, bastión del grupo 'Provincia del Sinaí', que juró lealtad al califato autoproclamado por los yihadistas del Estado Islámico (EI) en Irak y Siria.
En los últimos años, los objetivos de estos ataques eran exclusivamente las fuerzas de seguridad, salvo en un atentado suicida que acabó con la vida de tres turistas surcoreanos y el conductor de su autobús en febrero de 2014 en el puesto fronterizo de Taba, en el Sinaí, cuando pasaban a Israel desde Egipto.
En los años 1990, una serie de atentados mortíferos contra turistas había golpeado con dureza la economía egipcia, cuyo sector turístico es uno de los pilares.