Una irano-británica encarcelada en Irán, trasladada a un servicio psiquiátrico

Londres (AFP) - La irano-británica Nazanin Zaghari-Ratcliffe, encarcelada en Irán desde 2016 por sedición, fue trasladada al servicio psiquiátrico de un hospital en Teherán, donde es vigilada por los Guardianes de la Revolución, anunció el miércoles su familia en Londres.
'Puede que esto sea un preludio a su liberación', pero también 'es posible que esté ocurriendo otra cosa', advirtió su esposo, Richard Ratcliffe, a la radio pública BBC 4.
Un portavoz de la primera ministra Theresa May afirmó posteriormente que el gobierno británico está 'extremadamente preocupado por el bienestar de Nazanin y pide su liberación inmediata'. 'Instamos a Irán a que permita que sus familiares la visiten y que comprueben su tratamiento médico', agregó.
Richard Ratcliffe reclamaba desde hace tiempo que su mujer recibiese cuidados médicos, pero ahora se inquieta.
'Cuando se hizo evidente que no podíamos acceder (a ella) y que está bajo el control de los Guardianes de la Revolución, evidentemente empezamos a estar más preocupados', afirmó, confiando en que al menos representantes de la embajada británica en Teherán puedan visitar a su esposa.
La mujer, de 40 años, fue trasladada el lunes de la prisión de Evin al hospital Imam Jomeini, donde su padre, que esperó en vano durante cuatro horas el martes para verla, pudo constatar que estaba bajo la vigilancia del ejército ideológico del régimen iraní.
Según sus allegados, no se precisó la duración ni las características del tratamiento de Zaghari-Ratcliffe.
Un psiquiatra había recomendado su traslado a un hospital debido al 'fuerte deterioro' de su estado.
'Estaba en buena salud y feliz cuando viene a Irán a ver a mis padres', dijo Nazanin, según su familia, antes de ser trasladada. 'Tres años y pico más tarde, me ingresan en una clínica de salud mental', lamentó.
Sus allegados dicen no haber tenido contacto con ella desde hace 'más de 36 horas'.
Empleada de la Fundación Thomson Reuters, vinculada a la agencia de prensa británica-canadiense del mismo nombre, Nazanin Zaghari-Ratcliffe fue detenida el 3 de abril de 2016 en el aeropuerto de Teherán en compañía de su hija de 22 meses Gabriella, después de haber visitado a su familia.
En septiembre de 2016 fue condenada a cinco años de cárcel por participación en manifestaciones en 2009 contra el régimen y acusada de querer derrocarlo, lo que ella desmiente. Londres no ha logrado hasta ahora obtener su liberación.