Ante el inicio de las clases presenciales en la Universidad de Panamá, la Contraloría dará curso al refrendo correspondiente para las compras destinadas al funcionamiento de las cafeterías universitarias y la adquisición de papel para la elaboración de diplomas, en beneficio directo de estudiantes, docentes y personal administrativo, informó el contralor general, Anel Flores.
“La válvula de refrendo se abre en la medida en que se cumpla con lo que establece la ley. La Universidad de Panamá debe ser un ejemplo nacional de integridad, prestigio y responsabilidad institucional”, destacó Flores.
Asimismo, el contralor instó a las autoridades universitarias a rendir cuentas sobre situaciones que preocupan a la ciudadanía, entre ellas: el deterioro de la infraestructura, el uso indebido de bienes estatales para fines ajenos a la función educativa y la existencia de estructuras clientelares que inciden en la administración del presupuesto universitario.
Flores indicó que “se encuentra a la espera de la lista oficial de estudiantes con más de 10 años inscritos en la casa de estudios superiores, que aún no han obtenido ningún título, y que continúan matriculando materias únicamente para mantenerse dentro del sistema y beneficiarse de recursos que deberían estar enfocados en quienes verdaderamente aspiran a convertirse en profesionales al servicio del país”.
Además, se informó que continúan las auditorías y revisiones en diversas entidades del Estado, incluida la Universidad de Panamá, como parte de su deber constitucional de fiscalización.