Docentes en la era de la IA: adaptación y reconstrucción

Desde el COVID-19, los docentes han transitado una transformación vertiginosa. Pasamos de pizarras y aulas a plataformas digitales. Y cuando la educación presencial intentaba recomponerse, irrumpió una nueva ola la inteligencia artificial, irrumpiendo como una tecnología disruptiva, ubicua y muchas veces incuestionada. Frente a este escenario, la profesión docente enfrenta una encrucijada: adaptarse sin cuestionar, o reconstruirse con pensamiento crítico. La IA no solo reconfigura nuestras herramientas, sino que desafía el rol del educador, sus criterios pedagógicos y su ética profesional. Aquí nace la necesidad de una postura AI crítica: una forma de pensar la IA no solo desde su utilidad, sino desde sus implicaciones éticas, sociales y cognitivas. Esta mirada reconoce que los algoritmos no son neutrales: contienen sesgos, replican estructuras de poder y redefinen las formas de enseñar, aprender y evaluar. Adoptar una postura AI crítica implica alfabetización algorítmica, conciencia ética, autonomía pedagógica y formación de estudiantes críticos frente a la tecnología. No basta con saber usar IA: debemos saber cuándo, cómo y por qué usarla... o rechazarla. Hoy más que nunca, enseñar ya no es solo transmitir conocimientos, sino formar sujetos capaces de pensar incluso frente a las máquinas que “responden todo”. ¿Qué tipo de educadores queremos ser cuando el algoritmo ya parece haber respondido por nosotros? * Consultora tecnológica.