EDITORIAL : Una carga pesada

Europa discute y decide el futuro de los subsidios para reducir el déficit fiscal y tener economías fuertes y eficientes. Así está ocurriendo en muchos países que gozaron de un Estado de bienestar financiado por los impuestos y los préstamos.
Ninguna nación resiste, en el tiempo y está obligada a realizar ajustes y reformas. En Panamá, los subsidios, leyes especiales y ajustes automáticos de salarios en el gobierno, se han convertido en una amenaza para la estabilidad.
La presión se ejerce sobre el presupuesto público y reduce la capacidad de los gobiernos para invertir en obras públicas y sociales. El dinero del Estado no es infinito y financiar esos gastos con dinero prestado, ya no es la solución.
La eficiencia se debe lograr con mucho ahorro, planificación y mucha disciplina con todos los gastos.