Maduro, Robespierre, Mussolini y Ceausescu.

Maximilien Robespierre dirlge la Revolución Francesa a golpe de guillotina, implanta un régimen de Terror y asesina a centenares de opositores en su paranoia. Benito Mussolini, líder fascista de Italia y aliado de Hitler.
Nicolás Ceausescu líder comunista rumano instaura una dictadura férrea al estilo de Stalin. Nicolás Maduro, líder chavista establece una narcodictadura en Venezuela. La egolatría de Hugo Chávez, hace de la patria de Rómulo Gallegos, un santuario de la FARC. La injerencia de Chávez en los asuntos internos de Colombia, es responsable de los muertos, secuestrados, desaparecidos y heridos de miles de colombianos. Maduro protege a la narcoguerrilla colombiana y la cúpula militar continúa con el negociado de las drogas. Maduro es el títere de los Castro, impuesto por un fraude gigantesco contra Henrique Capriles. La estulticia de Nicolás supera cualquier monomanía, es el peor ejemplo de la supuesta izquierda latinoamericana y del socialismo del siglo XXI.
Los ñangaras criollos lo avalan, del saqueo de los fondos públicos de ese trágico país, muchos petrodólares llegan al país como subsidios ideológicos. Los chavistas invierten millones en Panamá con el lucro inmobiliario, los piñales de Chorrera, los negocios comerciales y depósitos bancarios. Los estados totalitarios son expertos en crear autoatentados a los dirigentes.
Maduro ante la creciente protesta pública por el control de la gasolina, las huelgas de enfermeras, médicos y maestros, las demandas de los obreros de las refinerías, la crisis alimentaria, la pobreza extrema, inventa un supuesto magnicidio. Desata el terrorismo de estado, encarcela a los dirigentes de la oposición y la represión brutal es típica de los autócratas. La farsa del atentado es grotesca. ¿El final de Maduro será como la ejecución pública de Robespierre, Mussolini o Ceausescu? ¿Se esconderá bajo las faldas del Vaticano como lo hizo Noriega?
Ricardo Ríos Torres
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Escritor.