Influencers bajo la mira por contenido
Los videos virales generan consecuencias legales, éticas y de seguridad para las personalidades de la farándula

Las redes sociales se han convertido en un espacio donde la creatividad y la viralidad coexisten con la polémica y en ocasiones con riesgos para la seguridad y la integridad de terceras personas. Dos casos recientes en Panamá han puesto en evidencia la necesidad de reflexionar sobre los límites de la exposición y el comportamiento en público.
El primer caso involucra a la bailarina Mary Gaby Sealy, quien compartió un video bailando y colgándose de las barandas dentro de un Metro Bus. Ante la difusión del material, MiBus recordó que las barandas están diseñadas para brindar apoyo y estabilidad en el trayecto, y no para soportar el peso de una persona.
Por otro lado, la creadora de contenido Marlene Gilbert también está en el centro de la polémica por un video en el que participó junto a su hijo menor de edad, exponiéndolo a un trend en TikTok. La Senniaf dispuso que participe en sesiones de fortalecimiento familiar, mientras que las evaluaciones psicológicas serán remitidas a la Fiscalía de Familia para investigar posibles vulneraciones de derechos del menor.