Mehmed II toma Constantinopla
Turcos se tomaron el territorio que mil años protegió al Imperio bizantino
La caída de Constantinopla en 1453 marcó también el fin de la Edad Media, una batalla que duró 53 días, en la cual las tropas del sultán otomano Mehmed II, de apenas 21 años, hicieron caer las murallas de la que fuera capital del Imperio bizantino por más de mil años.
El cerco comenzó el 6 de abril de 1453, cuando los otomanos rodearon la ciudad por tierra y mar. Frente a un ejército otomano estimado en más de 80 000 hombres, el emperador Constantino XI Paleólogo contaba con solo 7 000 defensores, entre soldados bizantinos, mercenarios genoveses y venecianos.
Las fortalezas de Teodosio, de dobles murallas y un foso profundo, habían resistido innumerables invasiones por siglos. Pero esta vez, una nueva arma cambió el curso de la historia: los grandes cañones de bronce fundidos por el ingeniero húngaro Orban, capaces de abrir grietas en los muros que parecían eternos.
“En cierto modo, cabría decir que la caída de Constantinopla causó en su tiempo un impacto comparable al que los hechos del 11-S de 2001 han tenido en nuestra época”, destaca National Geographic.
En la madrugada del 29 de mayo, el ejército otomano lanzó su ofensiva final. Durante horas, el estruendo de los cañones y el clamor de los combatientes llenaron el aire.El emperador Constantino XI, rehusando abandonar su ciudad, se unió a sus tropas en combate y murió defendiendo las murallas. Cuando las fuerzas turcas lograron penetrar las defensas, el destino del imperio estaba sellado.
La caída de Constantinopla no solo significó el fin del Imperio bizantino, sino también un punto de inflexión en la historia mundial.