Ministra de la mujer exige acciones urgentes tras muerte de una joven y su hijo en Colón
Niurka Palacio, ministra de la Mujer, alzó su voz tras el lamentable caso ocurrido ayer en Gatún N°2, corregimiento de Limón, provincia de Colón, donde una madre de 24 años y su hijo de 6 años perdieron la vida presuntamente a manos de un familiar.
Palacio destacó que la violencia es una crisis de salud pública que afecta a toda la sociedad, instando a la acción conjunta de familias, iglesias, organismos de seguridad, ONG’s e instituciones públicas para erradicarla. Además, hizo un llamado a la población a marcar la línea 182 para denunciar posibles actos de violencia, una herramienta disponible las 24 horas, los siete días de la semana y completamente gratuita.
La ministra aseguró que el Ministerio de la Mujer continuará ofreciendo apoyo integral a las familias afectadas y subrayó la necesidad de educar y sensibilizar para prevenir cualquier tipo de violencia que vulnere la dignidad e integridad de las mujeres.
“Inmediatamente que supimos del hecho nos apersonamos al área y hablamos con la suegra de la víctima, quien expresó su consternación por lo ocurrido. Vamos a darle seguimiento, a ambas familias para que sepan que no están solas con atenciones psicológicas”, enfatizó.
Además reiteró su rechazo a cualquier tipo de violencia y sus diferentes manifestaciones ya sean físicas, psicológicas, sexuales, económicas, digitales, patrimoniales o cualquier otra forma que lesione la dignidad, libertad e integridad de las mujeres y reafirmó que el Ministerio de la Mujer está comprometido en la atención y acompañamiento de las víctimas y sus familiares.
Por su parte, Yaravy Almanza, psicóloga especialista en violencia y coordinadora del Centro de Atención Integral (CAI) de Panamá, advirtió que la violencia no es un tema solo de la relación de pareja, sino que tiene muchos elementos que convergen dentro de la convivencia familiar.
“En el contexto de nuestras casas podemos también prevenir la violencia. Es importante que estemos vigilantes ante cualquier comportamiento distinto o diferenciado de las personas que conviven con nosotros diariamente, sobre todo aquellos que indiquen lesiones o daños a otras personas o así mismas, en especial a nuestros hijos e hijas en su crecimiento y desarrollo, ya que en la entrada la adultez puede darse manifestaciones o indicativos de alguna condición que requiere ser atendida”, dijo la especialista.
