Las protestas y sus motivos
Mientras la medida de presión adoptada por los médicos de un hospital público en reclamo de mejoras laborales halla seguramente la compresión de los ciudadanos en general, la emprendida por un sector de transportistas que pide flexibilizar las leyes para el sector no correrá con suerte similar. Los primeros cumplen sus tareas con abnegación, no pocos sacrificios y enfrentados a la incomprensión y hasta la indolencia de las autoridades, lo que determina condiciones lastimosas para su desempeño, incluidas demoras para recibir sus emolumentos. Los segundos, además del estado desastroso de sus vehículos y una conducta la mayoría de las veces patibularia para con los usuarios, recurren siempre a acciones así que llevaron a pervertir un sistema que avergüenza al país. De ahí las diferencias entre dichas protestas.
