La opinión tiene límites

Aunque la libertad de opinión y expresión es un derecho fundamental, no es absoluto y existen límites legales y éticos que la regulan. Hoy en día es muy común leer, ver y escuchar en las redes sociales como cualquier persona habla mal de otra. Le menciona temas personales, privados o cualquier cosa que se le ocurra, éstos apoyados de quienes replican la información muchas veces afectando a la persona que se refieren.
No se puede utilizar la libertad de expresión para difamar, calumniar o injuriar a otras personas. Esto es algo que toda persona debe grabarse en su memoria, que no porque tengamos la oportunidad de escribir libremente un comentario en cualquier red social, tenemos derecho que sacar información de otra persona o peor aún, inventar o suponer cosas.
En Panamá, tanto la calumnia como la injuria son delitos contra el honor y la reputación de las personas, y están regulados en el Código Penal. Pero no debemos limitarnos solo porque es un delito sino porque se debe medir lo que vamos a decir y pensar en las repercusiones que se puede tener. Ponga límites para que nos afecte a los demás.