"Es un momento feliz", afirma Paolini pese a perder la final
La italiana Jasmine Paolini, que fue claramente superada (6-2, 6-1) por la polaca Iga Swiatek en la final de este sábado en Roland Garros, señaló que para ella era en cualquier caso "un momento feliz", ya que nunca había llegado tan lejos en un Grand Slam.
Paolini, decimoquinta del mundo, ha sido la sorpresa de la competición y llegaba con el cartel de víctima a la final ante una Swiatek que conquistó su cuarto título en París con apenas 23 años.
"Es un momento feliz, no es un momento triste para mí", afirmó la jugadora toscana de 28 años en su conferencia de prensa posterior al partido, sin perder su sempiterna sonrisa.
"He intentado hacerlo lo mejor posible, pero es difícil jugar a un nivel así de intensidad. Nunca había jugado contra alguien que jugara con esa intensidad. Creo que ha sido el partido más difícil de jugar de toda mi carrera", apuntó, considerando que Swiatek sobre tierra batida es "increíble".
Paolini logró dos títulos WTA en su carrera y empezó sin complejos en la final, llegando a lograr un 'break' para ponerse por delante 2-1 en el primer set. Pero ahí Swiatek encadenó diez juegos seguidos ganados para dejar el choque con 6-2 y 5-0 a su favor.
La italiana frenó ahí la caída libre ganando un juego, pero a continuación la polaca cerró el partido con un 6-1.
Gracias a su subcampeonato en Roland Garros, Paolini entrará el lunes por primera vez en el 'Top 10' de la WTA, subiendo al séptimo lugar, pero ella prefiere ser cauta ante el futuro de su carrera.
"Creo que estará bien ir descubriéndolo etapa a etapa", afirmó.
En el futuro querría volver a enfrentarse a la estrella polaca.
"Jugar contra ella puede permitirme añadir cosas a mi juego. Es verdad que es difícil, pero al mismo tiempo eso me permite entender qué tengo que mejorar", aseguró.
