Una convivencia que está rota

18 de agosto de 2023
La vida nocturna escandalosa tiene un obstáculo: el derecho de los ciudadanos a no ser afectados por el volumen alto o el exceso de ruido. A pesar de que existe una legislación y normas claras sobre la operación de discotecas, bares, jardines, lava autos o “food truck”, un gran número son instalados en áreas residenciales sin medir las consecuencias que tienen sobre la vida de la gente. Esa convivencia entre las actividades de diversión y los residentes de una zonas está rota. El negocio no se puede imponer afectando la calidad de vida de otros. Los ministerios de Salud, Comercio y municipios tienen que poner orden.