“Paz social y unidad nacional”, claves para terminar conflicto
Empresarios y representantes de distintos sectores de la economía aseguran que es necesario pensar en el bienestar del país, deponer intereses individuales y tomar las decisiones que permitan lograr una reactivación económica


Líderes de los principales gremios del sector productivo y empresarial hicieron un llamado a la paz social, al entendimiento y a la unidad nacional, para resolver la situación que atraviesa el país producto de los cierres de calles y huelgas que cumplen hoy 48 días.
Sindicatos, gremios magisteriales y miembros de la sociedad civil exigen la derogación de la Ley 462 que reforma la Ley Orgánica de la Caja de Seguro Social (CSS).
Alicia Jiménez, presidenta de la Federación de Cámaras de Comercio de la República de Panamá (FEDECAMARAS), indicó que “la paz social bajo esta coyuntura de crisis puede buscar un equilibrio”. Aseguró que para ello es necesario que las partes “cedan sus posturas”, ya que “el costo de la pérdida del tejido social es irreversible”.
Por su parte, Raúl Montenegro, presidente del Sindicato de Industriales de Panamá (SIP), señaló que “le estamos haciendo un daño tremendo a este país, un diálogo con condiciones no es diálogo. Los gremios y grupos que están en las calles deben pensar más en Panamá, son grupos cuyos motivos son políticos, no hay sustento para algo verdadero”.
Montenegro afirmó que “tenemos que dejar que la ley funcione, que la ley caminé, así como en 2005, hoy 20 años después nos dimos cuenta de algunas cosas que no hicimos correctamente”. Añadió que “tenemos que trabajar para que en este país haya pleno empleo, si no hay empleos, no hay cotizantes y si no hay cotizantes, no hay aportes al Seguro Social”.
Augusto Jiménez, productor de Tierras Altas, provincia de Chiriquí, dijo que “es importante el diálogo y que el país vuelva a la normalidad, que termine no solo los cierres, sino que se retome a la actividad porque ese dinero deja de circular en la calles y afecta a la producción”.
ML | Los más de 40 días de cierres de calles en la provincia de Bocas del Toro provocaron el cierre de la empresa Chiquita Panamá, el cese de operaciones provisional de una constructora, afectaciones al agro, al turismo y al comercio.
Aris Pimentel, presidente de la Cámara de Comercio de Bocas del Toro, dijo que “la producción de banano era uno de los motores principales de la economía en la provincia, que pagaba en salarios semanales alrededor de 4 millones de dólares que ya no se verán”. Pimentel agregó que “son muchas las empresas que brindaban sus servicios a Chiquita y que ahora no recibirán esa liquidez”.
Pimentel añadió que “tras el cierre de la empresa Chiquita, alrededor de 7.300 personas de puestos indirectos quedaron desempleados y de manera directa unas 2.000 personas”.
El empresario hizo un llamado “al diálogo con el objetivo de buscar solución lo más pronto posible y que no se afecte más la economía del país”.