Cierre de negocios y desempleo, lo que dejaron las protestas en Bocas
Líderes de gremios empresariales de Bocas del Toro aseguran que urge ejecutar un plan para la recuperación económica de la provincia. Destacan que la inversión en infraestructura turística y el desarrollo del agropecuario son esenciales
Empresas cerradas, negocios destruidos y vandalizados, desempleo y escasez de alimentos y productos, son algunas de las consecuencias que dejaron los más de 50 días de cierres y protestas en la provincia de Bocas del Toro.
Aris Pimentel, presidente de la Cámara de Comercio de Bocas del Toro, indicó que “la economía está atravesando una situación muy difícil después de estos más de 50 días de cierres y de la última semana de la revuelta de vandalismo. Hemos quedado muy mal”.
Pimentel dijo que tienen “cero comunicación terrestre, no ha entrado ningún tipo de producto. Cero combustibles. Son muchos millones de dólares que se han perdido, cero movimiento en la parte turística. Hablamos de más de $100 millones solamente en el sector comercial y turístico”.
El empresario añadió que “el desempleo aumentó. Eran 7,300 trabajadores los de Chiquita Panamá y todos los trabajadores en las empresas que tenían algún tipo de relación de ventas de servicios o productos a la bananera. Todos estamos paralizados”.
Rubén Chai, presidente de la Cámara de Turismo de Almirante, ha afirmado que se encuentran “bajo la incertidumbre, la actividad económica está nula. Estamos en escasez, productos de primera necesidad no han podido llegar a la provincia”.
Juan De Caro, presidente de la Cámara de Turismo de Bocas del Toro, manifestó que “la logística de poder conseguir insumos para mantener la poca demanda que hay es complicada. Esto provoca que los gastos se dupliquen. No tenemos combustible, no hay gas en las tiendas, lo poco que hay en inventario es para subsistir. Hay negocios que han tenido que cerrar, es preocupante”.
ML | Unas 19 propiedades públicas y privadas fueron vandalizadas en medio de las manifestaciones en Bocas del Toro. Según los datos oficiales, de ese total, unas 11 son instalaciones privadas y 8 son propiedades del Estado. Algunas entidades del gobierno afectadas son la AMPYME, el Mitradel, la Lotería, un almacén de insumos y medicamentos de la Caja de Seguro Social, la Planta Potabilizadora del Silencio, el Aeropuerto Manuel Niño de Changuinola, la Contraloría General y las instalaciones de la DNIJ/Changuinola.
